servicio uber

PREGUNTA
Soy una mujer de 32 años divorciada y un día que mi carro tenía desperfectos mecánicos decidí por primera vez usar el nuevo servicio de taxi, UBER. A los 5 minutos llegó un coche negro a mi puerta, era un joven no más de 35 años que al verlo causó una impresión en mí, pero después de unos minutos de conversar amenamente con él llegué a mi destino. Debo confesar que ha habido 4 veces más donde he contratado el servicio y espero hasta que está disponible y lo pido a él como chofer. Me da pena averiguar si es casado, soltero, no sé qué impresión se pueda llevar de mí ¿Qué puedo hacer?

RESPUESTA
Querida Estela, creo que la impresión que se pueda llevar de ti, es buena e incluso ya se la ha llevado, comentas en tu carta que han tenido conversaciones amenas. El siguiente paso es muy sencillo, es solo cuestión de fluir en la plática e indagar un poco sobre si es casado, soltero, etc. Lo que puedes hacer es: hablar de ti, de lo que te gusta hacer y devolver la pregunta, verbigracia “¿Tú qué tal?” Es un ir y venir de información, hablar de ti y al mismo tiempo preguntar “por curiosidad” sobre el otro. Si resulta que es casado y te lo menciona, para no sentirte “tonta” o apenada puedes hablar de algún amigo también. Por ejemplo: “Sí Ernesto y yo opinamos igual: o “hacemos lo mismo…” Ernesto (o cómo se llame tu amigo) debe de existir ya que es mucho más fácil hablar de lo tangible, posible, recordando y compartiendo memorias, que tratar de inventar historias nuevas. Actúa con naturalidad y si resulta que es también soltero, puedes incluir una frase en la conversación, si es que aplica: “¡Wow!, me encanta tener este tipo de conversaciones, tan profundas y divertidas”. Y antes de dejarlo decir más, le echas un cumplido sin verte muy obvia… “Es tan difícil encontrar gente como tú en estos tiempos, inteligente, amable, y sobre todo que piense tal cual pienso yo”. Por supuesto esto es solo un ejemplo pero tú vas a utilizar tus propias palabras con sus sinónimos y/o antónimos necesarios. ¡Suerte!